Así es, existen medicamentos muy usados, entre los que destacan los antiácidos y los antidepresivos, que alteran nuestra flora intestinal.
Parte de la estabilidad de la microbiota intestinal va a depender de los ácidos biliares, y estos compuestos alteran el pH de los mismos interfiriendo entonces en la buena maduración del ecosistema de la microbiota intestinal.
Ante un incremento de la acidez estomacal debemos descartar una infección bacteriana ( H. Pylori) o una lesión de la mucosa gastroduodenal dentro de las causas más importantes. Paralelamente se deben evaluar las posibles agentes externos que puedan estar provocando este cambio en el pH del estómago como lo son: el exceso de cafeína, alcohol y cigarro. También los medicamentos antinflamatorios y el estrés.
Muchas veces estos síntomas pueden manejarse con el cambio en la alimentación y el estilo de vida y el uso de probióticos, sin necesidad de recurrir a la medicación que solo traerá impedimentos a la auto reparación de nuestro organismo.
No olvidar que existen productos bioreguladores que ayudarán en el proceso de reparación deldaño sin interferir en los mecanismos naturales.
Ante la aparición o intensificación de síntomas gastrointestinales el ideal es buscar la ayuda de un profesional que pueda evaluarlo desde un punto de vista integral teniendo en cuenta los factores orgánicos, nutricionales y emocionales.
